No somos prolijas, nacimos con fórceps, nunca quisimos salir.
Mamá estamos bien, cantan tres compañeras de escuela del conurbano sur que ensayan hace diecisiete años en el garage de la casa de la madre de una de ellas. El sueño eterno de quienes llegaron a este mundo a la fuerza: una banda de rock para plasmar ahí todo lo que molesta, duele, enerva o da felicidad extrema. Nacidas con fórceps es el nombre de la banda y el nombre de la obra. La obra, que es un recital donde La Papo, Turbina y Enana interpretan su repertorio completo de diez o doce canciones, se lleva adelante con dos pilares fundamentales que la sostienen de principio a fin: el humor y el talento.
La grotesca representación a esas banditas de rock que en casi todas las oportunidades vimos surgir con varones (rock chabón, bandas de garage, chicos que tocan instrumentos en el colegio y en el conurbano) es la inteligencia que destaca a Las Ramponi como creadoras de cualquier otra propuesta que pueda ser similar.
Se agradece que por fin, alguien se tome en serio la ridiculez y la exageración de los personajes musicales de arriba de los escenarios, y haga de esa dinámica una obra, una representación y una comedia integral.
Lo agudo y entrañable de sus personajes, sus formas de hablar, sus anécdotas, sus movimientos, sus estados, los furcios o los clichés, todo lo icónico que se puede ser a la enésima potencia atravesado por una actuación que no tambalea en ningún momento. Las tres actrices son ellas rockeras sin dudar nunca, y tampoco se desprenden de sus personajes ni siquiera en el saludo final. Otro punto que se agradece.
Estas mujeres han roto la realidad de lo musical y la ficción de lo teatral, encontraron en este método de composición un atractivo impresionante que a los espectadores los abraza desde el comienzo, haciéndonos empatizar absolutamente con sus historias, sus pensamientos y sus canciones. En cincuenta minutos nos transforman en amantes de una banda que no existe.
Entre picadas de autos prestados por Av. Pasco, indigestiones por birras y huevos fritos, canciones a las milanesas, a los gatos que toman vino y fuman con sus dueñas, a los choques, a la sala de ensayo y al tormento adolescente de una niña obligada a estudiar flauta traversa se componen las temáticas de sus canciones que engrosan un repertorio dignísimo de ser un disco.
Si Viudas e hijas de Roque Enroll hubiera hecho un espectáculo con Hugo Midón probablemente el resultado hubiera sido algo parecido a lo que Las Ramponi hacen con Nacidas con fórceps.
Una obra, o un recital, o una obra de un parto a la fuerza absolutamente imperdible.
Nacidas con fórceps es un espectáculo del grupo teatral Las Ramponi compuesto por Fiorella Cominetti, Julieta Filipini y Carolina Bonzi Ferrer. Se presentan los viernes a las 22.30hs en el Cultural Morán. Las entradas aquí.
FICHA TÉCNICO/ARTÍSTICA
Idea: Las Ramponi
Dramaturgia: Las Ramponi, Laura Fernández
Intérpretes: Fiorella Cominetti (Enana), Carolina Ferrer (Turbina), Julieta Filipini (Papo).
Vestuario: Julieta Capece
Escenografía: Julieta Capece
Iluminación: Diego Becker
Diseño de Sonido: Jorge Lagos
Producción musical: Francisco Cirimele
Música original: Las Ramponi
Fotografía: Luisina Jacinto
Diseño gráfico: Luisina Jacinto
Asistencia de dirección: Iraitz Gómez Cabrera
Producción ejecutiva: Zoilo Garcés
Dirección: Las Ramponi
Duración del espectáculo: 60 minutos
Comentários